Cheo Navarro y su Orquesta - Venezuela
De formación musical autodidacta, comienza a interesarse en la música latina gracias a la afición de su padre, cuya colección de discos escuchó con frecuencia desde niño.
Cada sábado, desde temprano, su casa vibraba con la música de Tito Rodríguez, la Sonora Matancera y todas las orquestas de los años 60 que visitaban Venezuela. Un día, quedaría tan impresionado al ver a la orquesta de Tito Rodríguez por televisión, en El Show de Víctor Saume, que desde entonces no dejaría de sacarle música a cuanto objeto se atravesara en su camino.
Su madre, la Sra. María, gusta contar que cada mediodía, justo antes del inicio de Llegó la hora de la salsa, el sabor y el bembé, el programa radial que conducía Phidias Danilo Escalona, su hijo tenía una batería armada con ollas, libros o tobos como tambores, un cenicero de cobre como cencerro, una tapa de olla “mondonguera” amarrada con pabilo y guindada del sócate del bombillo para usarla como platillo, así como lápices y creyones, que usaba como baquetas; a lo que Cheo añade que tanto para él como para Miguelito Pacheco (bongosero de la desaparecida Salsa Mayor), la mejor campana de mano era la lata de crema de arroz Polly.
Desde los 14 años se le vio tocar el furruco, la tambora y la charrasca en conjuntos de gaita. Eso sin dejar de asistir a los ensayos de los grupos de salsa del barrio, hasta que Omar Díaz lo incorporó en la suya, Omar y su Grupo, a la cual luego llamaría Los Tercos.
Desde entonces, han sido muchas las orquestas en las que ha participado José “Cheo” Navarro: en El 23 y junto a sus amigos, creó Los Players e inició su carrera profesional con Efraín Bolívar y su Sabor Tropical; luego seguiría con Los Juniors All Stars de Kiko Pacheco, el Sexteto Juventud, la Tropicana de Eldi Toro o Federico y su Combo Latino.
En 1973, funda junto con Moisés Dubaterre, Argenis Carmona, Freddy Roldán, Gustavo Pinto, Joel Ruiz y Luis Enrique Gamboa, el exitoso Grupo Mango, un experimento musical que se mantendría por 10 años e interpretaba salsa con influencias de jazz y bossa nova.
En paralelo, tocó con el Trabuco Venezolano de Alberto Naranjo, La Crítica de Oscar de León y La Renovación de Nico Monterola.
También fundador de Bailatino (1995), José “Cheo” Navarro ha participado además en Coco Ortega y su Sabor Matancero, Naty y su Orquesta, en la Orquesta Óyeme de Carlos Hurtado, las orquestas del “Pavo” Frank y Orlando “Watussi”, Los Incorregibles de Gerardo Lugo, Bacheo o Caribe Libre de Domingo Hernández, por mencionar algunas.
Respetado como figura de peso en la percusión venezolana, Cheo también ha jugado un papel de importancia en el ámbito de la composición. A él se deben temas emblemáticos como Bravo rumbero, Sonaré, La orquesta de moda, Peligro en la vía, Baila salsa o A Guapachá, en honor al famoso percusionista y maestro cubano que viviera en San Agustín del Sur.
Cheo Navarro, respetuoso admirador de Orestes Vilató, timbalero y bongosero como él mismo e integrante de la orquesta de Ray Barretto, ha participado en la grabación de entre 80 y 85 placas discográficas, además de haber acompañado a reconocidos artistas del género tales como Ismael Miranda, Héctor Lavoe, “El Pavo” Frank, Johnny Pacheco, Daniel Santos, Justo Betancourt, Cheo Feliciano, Andy Montañez, Tania o Pete “Conde” Rodríguez. Este músico y compositor venezolano ha girado por Estados Unidos, Francia, Colombia, México, Puerto Rico, Cuba y Australia, aparte de presentarse a lo largo y ancho de la geografía nacional.
Hoy en día, participa en Bailatino, Repicao, Alfredo Naranjo y El Guajeo y en su propia orquesta, con la que preparó su ópera prima titulada Tributo al ayer, un homenaje a “todos aquellos maestros que dejaron su sabiduría en la música”, para la que contó con la colaboración de 25 músicos y de la que procede el tema que lo representa en el catálogo discográfico VenezuelaDemo. Información obtenida de buscasalsa.com, bailatino.com.ve, Timbaleros en Caracas (edic. Alcaldía de Caracas) y entrevista de Jairo Aponte.
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